POESÍA JAPONESA(詩歌)—HAIBUN (俳文)

 
Hola, amigos míos, como ya os he explicado en otros post, es un poema japonés que combina la prosa con un Hokku, esta es la forma tradicional, ya que cuando comenzó a escribirse aún no se conocían los Haikus, ahora los dos poemas son válidos. El poeta japonés del s. XVII, Matsuo Bashō, fue uno de los pioneros en el cultivo de este género literario. Escribió haibun de gran calidad como sus crónicas durante sus numerosos viajes. Si necesitáis alguna explicación porque os apetezca hacer uno, aquí estoy siempre para vosotros. 🌸🌸🌸
Besitos de luz.

 El BOSQUE
 
Oigo el canto del canario, me transporta a bosques de hadas y élficos, allí donde la luna es de plata, iluminando las turquesas aguas del hermoso río.

Hadas se afanan pintando la hierba, termina el invierno, llega la primavera y todo estalla.

Mil flores de colores en las orillas llaman a las abejas para bailar el vals de la vida.

¡Cuánto color! Esa flor parece una esmeralda, aquella un rubí… Aquel élfico me mira y me ruborizo de vergüenza ante su pícara sonrisa, me río, hasta yo tengo el color del arrebol.

 

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Bailando el bosque

con las hermosas flores.

Es primavera.

 

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Haijin María.

 

 

 

16 comentarios en “POESÍA JAPONESA(詩歌)—HAIBUN (俳文)

  1. Muy bello el bosque, precioso, y esta parte es la que necesito más tiempo para desarrollar el Haibun. Voy a intentar uno cortito.

    Me ilusiona pensar que tengo un jardín, son cuatro acacias, alguna enredadera, tres rosales, los geranios que planté hace unos días y una pequeña fuente o estanque silencioso.
    Todos los días barro las hojas de la enredadera y luego me siento a contemplar la vida que existe en las acacias. Algunos nidos nuevos de los gorriones caprichosos que parlotean entre las ramas. Cuatro tórtolas que alternan su bajada al estanque, se quedan en el borde muy coquetas e inclinan sus cabezas para beber agua.
    Algunos gatos estiran sus patas y se revuelcan en la tierra perezosos… Las golondrinas me distraen, van y vienen, limpian sus nidos, cantan. Les doy la bienvenida. No estoy sola.

    Entre las ramas
    hay vida en el jardín.
    Vuelve el verano.

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  2. Es una descripción muy bonita María, tanto que casi deja al poema como un pequeño testimonio.
    El bosque en primavera cambia su capa, aún los altos prados mantienen la humedad que esponja el paso del peregrino. Junto al río el cuco celebra cantando que ha usurpado un nido.
    Vaya pájaro más ladino. Sobre una roca el color azulado, el lagarto se despereza del letargo mientras un ojo, vigila los círculos que traza el milano.
    En la pradera, las flores exponen por turnos sus pétalos al sol y el aroma del romero, echa una carrera para llegar al camino el primero.
    Adiós invierno
    gracias por tu don blanco.
    Felices sueños.
    Un besazo.

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